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miércoles, 17 de agosto de 2011

2.500Km en solitario - Relato I


Todo nuevo...
Hace mucho vengo postergando, por una u otra razón, algo que siempre me ha apetecido hacer, una clase de reto personal, vencer el miedo a la soledad. Sí, lo confieso... es que esa señora nunca me ha caído demasiado bien.

Por fin, se han alineado los astros y a raíz de una mezcla rara de situaciones personales que exigen reflexión y mis incesantes ganas de viajar y conocer nuevos paisajes, decidí: “me voy y me tengo que ir sola”. De repente, la soledad cambió de equipo y se convirtió en aliada.  Pero, aunque gritara la necesidad, yo de la soledad jamás me he fiado, así que, quería darle una oportunidad, pero seguía mosca.  Total, la necesidad de alejarme de todo ganó la batalla… mapas, rutas, Matilde debidamente revisada y con mono de carretera. Nos fuimos…

Todo pensado para salir hoy a las 8 de la mañana, pero a las 4 de la madrugada estaba la brasileña como un búho, en la cama, así que a las 8 me desperté, de golpe y agobiada. “Me cago en la leche”, iba a salir a las 8 y ahora, como mínimo, salgo a las 9… Y nada más pensarlo me di cuenta de la primera ventaja que me ofrecía la soledad. Pues claro, si voy sola, porque y para qué el agobio? Si no hay nadie esperándome y aquí decido yo qué hacer y cómo hacerlo Qué más da?

Tranquilamente, me duché, desayuné, cargué la pobre Matilde con dos toneladas de mochilas y a las 9:30 estábamos las dos saliendo de Madrid rumbo a los Pirineos.




Madrid, momentos antes de salir
Los primeros kilómetros, nos fuimos acostumbrando Matilde y yo, al equipaje que cambia por completo la dinámica de la conducción, por muy bien puesto que esté. Cuando la moto va muy cargada, se siente mucho más los vientos laterales. Pero bueno, rápido pillamos el truquillo y fuimos dejando asfalto atrás. Tenía ganas de salir de la autopista y disfrutar de la ruta, pero antes de eso, quedaban unos 400Km.  Dos paradas para repostar(nos) y adelante.
Durante estos kilómetros, escuché, música, pensé en las miles de decisiones que tendré que tomar,  canté, dije un par de cosas con un par de irresponsables que crucé por el camino (sí, igual estoy intentando mejorarme en este aspecto :s) y cuando me di cuenta, estaba en Huesca. Joder, qué rápido ha sido. Tras dejar Huesca atrás el paisaje fue poco a poco cambiando y a cada kilómetro me resultaba más guapo. En Barbastro, quité la música y cogí la A-123 y luego la A-138, en este tramo, descubrí otras tantas cosas nuevas para mí y sobre mí… normal, lo que se dice normal, no es que esté. Me pillé, riendo sola, gritando “uujuuuuuuuuu” y diciendo todas las palabrotas que me permite mi castellano, cada vez que veía ríos y embalses increíblemente azules y formaciones geológicas que dan alas a la imaginación (mis amigos geólogos hubiesen flipado en coloresss)

Embalse de El Grado - Pocos kilómetros antes de llegar al camping
 El olor de la vegetación se me metía por el casco y en estos momentos, en mi pensamiento ya no había espacio para nada que no fuera vivir estas sensaciones.  Una cosa es cierta, eche de menos a mis compañeras del comando Madrid, hubiera sido genial compartir con ellas estas emociones y estos paisajes… 1 punto menos para la soledad. Vaya, tengo que devolvérselo (:o). Es que paré un montón de veces para sacar fotos en los sitios que me apetecían (ufff!! Ya me imagino el jaleo para ponernos de acuerdo unas 12 mujeres, sobre dónde parar… jajajajajajajaja). Vale, devuelvo el punto a la soledad. Pero aún así hubiese querido mis compañeras conmigo… en este caso, solo le devuelvo ½ punto.
En el camping, monté la tienda en tiempo récord, me tomé un par de cañitas mientras daba noticias de que había llegado bien. Cogí los mapas, los folletos de la región, planifiqué las actividades de mañana, abrí una botella de vino, troceé un queso super rico, me puse a escribir este texto y me sorprendí una vez más con lo bien que puedo estar conmigo. Al final, la soledad no es del todo mala compañía! (por lo menos para el primer día J )
Planificando el día siguiente

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Que buena pinta tiene tu relato, acabo de leer la primera parte y ya estoy deseando salir del curro pa ponerme comodo y disfrutar leyendo y metiendome de lleno en los paisajes, carreteras, rios, pantanos y todo lo que has tenido la amabilidad de relatar. Ademas hace dos años hice pasrte de esa ruta en verano, asique tambien sera un revivir mi propia experiencia.
    Un saludo y adelante colega!!!!!

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    Respuestas
    1. Hola jluis, bienvenido al blog :)
      Me alegro que te haya gustado el primer relato, espero verte paseando por aquí más veces.
      Gracias por tu visita y por los ánimos
      Un saludo

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